Nuestra visión era crear el cuidado capilar más puro y eficaz posible. Para lograrlo, nos dimos cuenta de que la clave estaba en eliminar el agua y los aditivos nocivos que suelen encontrarse en las fórmulas a base de agua. Esto nos llevó a desarrollar una tecnología innovadora que nos permitió eliminar el agua por completo, dando como resultado un producto verdaderamente superior.

El efecto secundario es un producto más fácil de transportar y ambientalmente sostenible que los disponibles actualmente. El cofundador Michael Dueñas ideó los productos sin agua en 2015. Gracias a su amigo y químico de toda la vida, el cofundador Straun Phillips, se creó el primer champú en polvo. Tras miles de fórmulas, nacieron el champú y acondicionador sin agua perfectos.